Quién no haya servido a alguien durante estos 7 meses de pandemia ha desperdiciado este tiempo.

Todo reto es verdaderamente una oportunidad para hacernos mejor persona. Estoy segura que en cada crisis, crecemos y nos acercamos más a esa persona que queremos ser. Y, aunque no siempre alcanzo ese YO, siempre lo deseo y lo busco.

Por eso veo en el servicio un regalo inesperado de esta pandemia; porque me acerca más aún a ese ser humano que busco ser. Me regala ese mejor YO en el servicio.

Servir a mi familia

Desde el ambiente diario en nuestro hogar, el compartir con nuestros hijos, el poder ayudarlos en sus tareas…la cocina con los cinco en la casa, el “homeschooling” (busca mi blog sobre homeschooling)…

Si eso no me hace mas humilde y paciente…¡no se qué lo logrará!

El poder crear tiempo en mis días intensos de trabajo son un gran reto, pero el servirles me acerca más a ellos y nos une como familia.

Servir en mi trabajo

Para los que trabajamos en servicios de salud, “servir” debería ser obvio. Pero no siempre es así. Todos reaccionamos de maneras diferentes, o mas aún, no sabemos cómo vamos a reaccionar, ante una situación de crisis.

En estos meses, mi trabajo se ha vuelto sumamente demandante y, muchas veces, me siento extenuada. Sin embargo, para lograr llegar a ese mejor YO que busco, hay dos cosas que elijo:

• servir con amor y,
• perseguir la paz en cada conversación

Cuando logro estas dos, los frutos se ven. Se sienten en ese YO que quiero ser, y en los que comparten conmigo cada día esta intensa labor.

Servir a mi comunidad y familia extendida

“¿Estoy en COSTCO, necesitas algo?”

Todos hemos hecho esa llamada…y es tan sencillo. ¡Qué bien se siente cuando podemos ayudar!

Con la locura de mi trabajo, he perdido esa experiencia de comunidad que, tal vez, otros experimentaron los primeros meses durante los cuáles muchos no podían trabajar. He visto cómo amigos y vecinos, incluso familia inmediata, han tenido que reinventarse para salir a flote económicamente por la falta de trabajo… así que mas allá de quejarme, doy gracias porque no perdí mi empleo.

Por lo cuál he buscado formas de aportar económicamente en la manera que pueda. También esa es una forma de servir. Si lo tienes compártelo!

Así que llegamos a la QUESTion:

¿Cómo has servido en estos meses y que frutos te ha dado?